La utilización de ayudas técnicas para la deambulación permiten a las personas con dificultad para la marcha la mejor realización de las actividades de la vida diaria. Estas ayudas permitirán la descarga del peso corporal en los miembros superiores aligerando entonces la carga el el miembro o miembros inferiores afectos, mejorarán la sensación de estabilidad ya que al aumentar la base de sustentación habrá un mejor equilibrio, y además servirán como medio de propulsión en la marcha.

Las ayudas podrán ser:

  • Fijas: Barras paralelas y barras en la pared tipo pasamanos
  • Autoestables: Andadores, bastones multipodales (con tres o cuatro patas). No son muy prácticos en escalelas.
  • Bastones: Simples, bastón inglés (de apoyo en antebrazo), muleta canadiense (de apoyo en brazo manteniendo el codo extendido), muleta de apoyo simultáneo en brazo y antebrazo, muleta axilar (su uso prolongado puede afectar el nervio radial)
  • Accesorios de ayuda para la marcha: Ortesis como el bitutor antiequino y la férula Rancho de los Amigos, y tutores largos para estabilizar rodillas y caderas.

El fisioterapeuta será el encargado de la reeducación de la marcha. Vamos a centrarnos en la deambulación con una o dos ayudas. Para ello es imprescindible que el paciente pueda mantener la bipedestación y que además tenga una buena estabilidad así como una buena musculatura de miembro superior y tronco, principalmente en cintura escapular, antepulsores y flexores de hombro, extensores del antebrazo, extensores de la muñeca y flexores de los pulgares.
En primer lugar se ajustarán las medidas de los bastones a la altura del paciente. En el caso del bastón inglés la longitud será la que exista entre el suelo y el trocánter mayor, si es un bastón axilar, con el hombro relajado la longitud será la distancia entre el suelo y 5 cm por debajo del pliegue axilar.

Podemos realizar unos ejercicios preparatorios:

  • Con una mano en una barra fija, desplazamos hacia delante y hacia atrás la muleta de la otra mano.
  • Apoyando la espalda a la pared y con una muleta en cada mano, realizamos cargas laterales pasando el peso de un bastón al otro. También sin mover los pies, podemos adelantar unos 10-15 cm las muletas y cargar el peso sobre ellas para después volver a la posición inicial.
  • Igualmente con la espalda apoyada en la pared , apoyamos el peso con los brazos en extensión elevando los pies alternativamente.

Patrones de marcha con dos ayudas:

  1. En cuatro tiempos: Simpre habrá tres puntos de apoyo.
    I.    Bastón derecho
    II.   Pie izquierdo
    III. Bastón izquierdo
    IV. Pie derecho
  2. Marcha simultánea en dos tiempos:
    I. Dos bastones y miembro lesionado
    II. Miembro sano
  3. Marcha alternante en dos tiempos:
    I. Bastón derecho y pie izquierdo
    II. Bastón izquierdo y pie derecho
  4. Marcha pendular:
    I. Dos bastones
    II. Péndulo de miembros inferiores hacia delante apoyando primero los talones por delante de los bastones y propulsión del tronco también hacia delante.
  5. Marcha de arrastre:
    I. Bastones
    II. Miembros inferiores se arrastran hacia delante

Patrones de marcha con una ayuda:

  1. Marcha en dos tiempos:
    I. Bastón y miembro afecto
    II. Miembro sano
  2. Marcha en tres tiempos:
    I. Ayuda
    II. Miembro afecto
    III. Miembro sano

La reeducación de la marcha con muletas se puede realizar en el domicilio del paciente, de esta manera podemos valorar el estado de su entorno y aconsejar en la recolocación de sus enseres si estos supusieran un obstáculo o impedimento para los desplazamientos a realizar.

Es imprescindible un buen plan fisioterápico enfocado a la deambulación tras una cirugía de cadera, cirugía de rodilla, ICTUS, o cualquier patología que interfiera en la buena marcha del enfermo.